El papa afirma que rechazar a los migrantes es un "pecado grave"
Francisco sostuvo que el Mar Mediterráneo "se ha convertido en un cementerio", y que los fallecidos en sus aguas "podrían haberse salvado".
Afirmó que la problemática no se resuelve "mediante leyes más restrictivas (o) la militarización de las fronteras", sino que facilitando "el refugio a quienes huyen de la guerra".